LAS TRES PELÍCULAS DE DANDO LA NOTA CONTIENEN ALTO PORCENTAJE DE QUEERBAINTING. PERO…¿QUÉ ES ESO?
Antonia Ivanova Angelova
Mucha gente ya conoce este término que tanta mala fama le está dando a muchas series y películas pero otros muchos no saben qué significa queerbaiting. ¡No os preocupéis! Os lo cuento. Queerbaiting sobre todo se encuentra en las pelis y series donde se da a entender una relación o ambiente romántico entre dos personas del mismo sexo o que hay algún personaje que parece queer. Pero en realidad nunca se dice explícitamente que ambos personajes se atraen ni que sean queers. Y que además aparecen de la nada dos personajes del sexo opuesto y acaban siendo dos relaciones heterosexuales. De esta forma captar la atención de la comunidad LGBT+ y no “defraudar” al público más conservador.
Este tipo de intento de representación de las personas LGBT+ no hace ningún bien para la comunidad y no sirve más que para molestar y enfadar a los miembros de la misma. Es importante poder ser representados con verosimilitud en el cine y en la pequeña pantalla para poder ir venciendo la fobia y el rechazo que tienen muchas personas.
¿Pero cómo superar el rechazo? Es muy sencillo, si contamos historias verdaderas y sin queerbaiting, desde el amor y la comprensión, las personas que rechazan a esta comunidad empezarán a no verlos como los malos. A lo largo de los años a los homosexuales les han representado como los villanos (queercoding) y con un final trágico. De esta forma el público pueda asociar homosexual con persona destinada a sufrir y ser malo. Necesitamos muchas más buenas representaciones LGBT+ en las que no se los trate de malos, ni de enfermos mentales, ni tampoco que acaben saliendo con una persona del sexo opuesto. Para que poco a poco esas personas cerradas de mente puedan ver a las personas LGBT+ como personas que son y no como villanos desgraciados.
Dando la nota, gran ejemplo de queerbaiting
Pero… ¡necesitamos pruebas! Tranquilos, aquí van. Muchos ya conoceréis las películas de Dando la nota que fueron un boom hace unos años. Y si no sois de la comunidad LGBT+ puede que no os hayáis percatado del queerbaiting ni tampoco de toda la polémica que se armó después de estrenarse la tercera película. Os lo cuento.
Dando la nota (la primera peli) tuvo una gran repercusión sobre todo entre la comunidad LGBT+. Todo gracias a la tensión sexual que rodeaba los personajes de Beca y Chloe. Era muy obvio que se sentían atraídas pero… ¡Sorpresa! Aparece un tío que empieza a salir con Beca de la noche a la mañana. Chloe tenía novio antes de conocer a Beca y entonces… ¿Porqué jugaron así con la ilusión de que salgan juntas? Para atraer al público LGBT+ pero sin defraudar al conservador y tradicional.
Pero esperad un momento porque faltan dos películas más. Y la cosa mejora (sarcasmo). Los fans de la comunidad pedían por todos lados que Beca y Chloe tuvieran algo en la segunda peli y lo que recibieron fueron más escenas de tensión sexual, miradas tiernas y discusiones que parecían de pareja. Los fans volvieron a hacer ruido y en la tercena película se coronaron haciendo un trailer entero dejando entender que Beca y Chloe tendrían algo en esta tercera entrega.
Spoiler: nada más lejos de la realidad. Volvieron a jugar con la ilusión de los miles de fans pero esta vez a lo grande. Al final Beca rechaza a un tío mientras ve a Chloe besarse con otro. Se ve claramente que le duele verlo pero ahí se quedan las cosas porque en realidad son solo “amigas”. Los fans se sintieron decepcionados y muy disgustados pero no con las actrices porque… ¿sabéis que? Ellas quisieron grabar un beso para los fans, por todo el apoyo durante esos años y así lo hicieron. Pero nunca llegó a salir a la luz. ¿Porqué? Es muy obvio: homofobia por parte de los jefes, no de ellas.
Después de este ejemplo es importante concienciarse de que las personas LGBT+ también se merecen verse reflejados en las pantallas sin queerbaiting ni nada de lo antes mencionado. Representando historias de amor como las de los heterosexuales, con drama pero final feliz. Porque también se merecen ser felices ¿no?