El 1 de junio llegó a Netflix 100 días con la Tata y se ha convertido en una de las películas más vistas de la plataforma
Existen muchos tipos de amor en esta vida. Siete, para ser precisos, si seguimos la teoría de Sternberg. Según este psicólogo existen tres características que determinan nuestro tipo de relación amorosa: la intimidad, la pasión y el compromiso. Dependiendo de la combinación de estas tres características viviremos un tipo de amor u otro. Así, cuando solo existe una sola característica nos podemos encontrar con el cariño (intimidad), el encaprichamiento (pasión) y el amor vacío (compromiso). Por otro lado, la combinación de dos características dará lugar al amor romántico (pasión e intimidad), amor sociable (intimidad y compromiso) y amor fatuo (pasión y compromiso). Y por último, el amor que reúne las tres características, y el más buscado por excelencia, es el amor consumado.
Si hubiese que seguir está clasificación para definir el amor que se muestra en 100 días con la Tata, sería un amor sociable. Pues la pasión, según este psicólogo, implica mantener relaciones íntimas. No obstante, no podría definir así el amor más puro y real que he visto, hasta el momento, en este documental de Miguel Ángel Muñoz.
100 días con la Tata es la historia de Miguel Ángel con la hermana de su bisabuela, Luisa Cantero. Una mujer que se dedicó toda la vida a cuidar de su familia, a trabajar y a estar al lado de los suyos. En este documental el actor, quién dirige y produce la obra, se abre en canal y expresa todo lo que significa su Tata para él y el miedo a perderla por la edad. Pero no solo eso, 100 días con la Tata es la historia de nuestros mayores. De como aquellos que un día nos cuidaron necesitan que les cuiden en su vejez. De la importancia del trabajo que supone dedicarse a ello y lo difícil que puede acabar resultando.
Una historia real, que traspasa las corazas a través de las secuencias en las que podemos ver los días buenos y los no tan buenos, tanto de Luisa como de Miguel Ángel. Lo que empieza como una película, acaba siendo un diario. Un diario de una época que ha marcado todas nuestras vidas, pero sobre todo, la vida de nuestros mayores.
Este documental llega como un soplo de aire fresco para recordarnos la importancia de cuidar de nuestros mayores. De apreciar cada pequeño instante de felicidad que vivimos con ellos y sobre todo, de expresarles nuestro amor.
Sinopsis
A los tres años de edad del actor Miguel Ángel Muñoz, sus padres tuvieron que recurrir a la Tata (Luisa Cantero) para que le cuidara mientras ellos trabajaban. Treinta y cuatro años después, una situación excepcional les ha devuelto a la misma situación pero a la inversa.
Durante este viaje de vida que hacen juntos desde hace tantos años, han cumplido muchos deseos y compartido muchos momentos. Entre ellos pasar juntos más de 100 días de convivencia a causa de una pandemia mundial, donde Miguel Ángel ha aprendido mucho y ha descubierto cuanto se parecen. Han recordado los momentos más importantes de su vida juntos, han bailado, reído, llorado… y hasta crearon un programa diario en Instagram llamado “CuarenTATA“, que ha convertido a Luisa en un fenómeno mundial. A él incluso se unieron actores, cantantes, deportistas, cómicos, para declararle su amor a la Tata. 100 días con la Tata también narra la experiencia más difícil después de una convivencia tan especial, la separación.
Premios de 100 días con la Tata
El documental, dirigido y producido por Miguel Ángel Muñoz, ha recibido el Premio Forqué a Mejor Documental. Asimismo, logró estar nominada en los Premios Platino y obtuvo nueve candidaturas en los Premios Goya 2022.