¿Porqué el cine de Hollywood se ha extendido con más facilidad por el resto del mundo? Descubrimos la verdadera historia del cine americano
Mireya Santiago Notario
Cuando se habla de cine en Estados Unidos, lo típico es pensar en Hollywood. Sin embargo, el nacimiento del cine como industria en esta parte del mundo tuvo lugar en Nueva York. El inventor Thomas Edison se encargó de monopolizar dicha industria, ya que para producir cine era necesario utilizar herramientas que él mismo había patentado. Hablemos de la historia del cine americano.
Pero le salieron competidores en la costa oeste. O mejor dicho, estos entendieron que la única forma de hacer frente a Edison y poder entrar en la industria cinematográfica era trasladarse al lugar más lejano dentro del mapa estadounidense: California. Donde los terrenos eran baratos y podían construir estudios de cine con mayor facilidad. Además, las horas de sol se alargaban más, lo que les permitía grabar durante un mayor periodo de tiempo.
La primera industria que aquí nació fue en Hollywood, en 1911. Quince compañías más siguieron sus pasos. Las películas que surgieron entonces y hasta los años 50, se han bautizado como cine clásico. Aquí habría que mencionar al director David W. Griffith, que se le apoda como el padre del cine moderno con su película El nacimiento de una nación (1915).
Sin embargo, en esta edad de Oro de Hollywod se llevó a cabo el llamado sistema de estudio. Donde los estudios controlaban toda la cadena de creación de películas, desde su grabación hasta su estreno pasando por el casting.
Así Hollywood se forjó como una dictadura de un puñado de estudios. Los actores y actrices eran simples productos moldeados por los propios estudios, que cobraban grandes cantidades de dinero pero no tenían ninguna potestad en el proceso creativo. Llegaban incluso a cambiarles el nombre para que fueran más comerciales; cuidaban su imagen pública por encima de todo, para que alcanzaran ese glamour tan típico. Hoy en día sucede lo contrario, el público quiere ver a las estrellas de cine en su día a día, de una forma natural. Los selfies sin maquillaje que cuelgan en Instagram es un ejemplo de ello.
En aspectos económicos, fue un modelo que tenía buena base porque aseguraba trabajo fijo. Ya que actores y actrices, directores, guionistas, etc. tenían un contrato fijo con la productora. Sin embargo, y para alivio del mundo creativo, este modelo cayó por su propio peso. No permitía experimentar, las películas se centraban en unos mismos géneros y con un mismo equipo de trabajo que se repetía continuamente.
Cuando apareció la televisión, la hegemonía del cine acabó y obligó a creativos a ofrecer nuevos productos. Pero el boom de la televisión caería rápidamente, y entonces el cine ascendió en su estatus. Es el nuevo Hollywood, con la exaltación de la violencia y la sexualidad. En esa época de Depresión, el cine se utilizó como una válvula de escape.
La historia del modelo Hollywoodiense
En Estados Unidos nacieron las grandes producciones, el mainstream, las grandes historias que ayudaban al público a evadirse de su vida cotidiana. El gran poder de Estados Unidos como potencia económica y política, junto a la gran inversión que se hacía (y se hace) en publicidad, extendió dicho modelo como el de mayor audiencia respecto al resto del mundo.
Las películas más taquilleras provienen del continente americano. Y es que desde que nació el cine en Estados Unidos, se han llevado a cabo políticas desde el gobierno donde se tiene en cuenta al cine como una de la mayores inversiones. El sistema de estudio ayudó mucho a esto, ya que se producían películas en masa.
Hoy en día, si comparamos la historia del cine americano con el español la principal diferencia está en la financiación. En el cine español, este dinero proviene de los impuestos, es dinero público. En EEUU sin embargo, la mayoría del capital que se invierte en cine es privado.
Además, las historias que se hacen en España están basadas en la cultura española, lo que excluye al público del resto del mundo. Lo que no sucede en películas americanas, que son historias que buscan su público en todo el mundo. Lo que es un factor importante a la hora de encontrar inversores internacionales.