Isabel González vuelve a fascinar a sus lectores con Nos queda lo mejor
“Nos queda lo mejor es un conjunto de relatos con un mensaje de optimismo. Aunque un tanto particular. No es un mensaje de optimismo, por ejemplo para quienes luchan por sus sueños y lo consiguen – nos va a matar esta frase-, sino para quienes luchan por sus sueños y no los consiguen. Para quien intenta hacerlo bien y le sale mal. Para quien toma una decisión y se echa atrás de inmediato. Para los payasos y las estríperes, y las payasas y los estríperes. Para quien trata de seducir a alguien con un moco pegado a la nariz. Para quien cobra la mitad. Para los viejos que se hacen los jóvenes y los jóvenes que se hace los sabios. Para quien recoge gatos. Para quien no sabe quien es. Para quien se sacrifica y no recibe recompensa. Para quien folla sin amor. Para quien ama sin follar. Para quien guarda su vida en una caja cuando decide abrirla ha perdido las llaves.
Y seguimos hasta que nos da la risa.
Nos queda lo mejor es un canto de amor al patetismo humano, a la chapuza universal. Una puesta en escena de la pasión por lo grotesco. Porque lo grotesco corporiza lo patético y si algo somos, por encima de todas las cosas, es gente patética y enamorada”.
Así describe Isabel González su nuevo libro Nos queda lo mejor. Este libro cuenta con 12 relatos cortos con un punto de vista del mundo totalmente diferente de una de las escritoras con más imaginación e ironía del panorama español.
Una autora autodidacta
La autora, una escritora autodidacta, comenzó su camino en la literatura con la publicación de Casi tan salvaje en 2012 y más tarde en 2017 la publicación de la novela Mil mamíferos ciegos, entre otras publicaciones. A día de hoy acumula grandes críticas de su obra; según la escritora Almudena Sánchez, es una de las escritoras más destellantes y feroces del panorama español. Se desenvuelve en los márgenes y se atreve con todo.
En una de las últimas entrevistas que realizó, describió su obra como una percepción del mundo. Y no es exactamente una percepción a la que el público este acostumbrado. Más bien resulta sorprendente y muy interesante esta forma de ver la vida repleta de ironía como mecanismo de defensa.
También le preguntaron sobre el trato a sus personajes aclarando que: “Yo jamás maltrato a mis personajes. Yo los quiero profundamente. Ni te imaginas lo que los amo.” Estos relatos cuentan con personajes muy particulares y diversos que no dejarán a nadie indiferente, personajes en los que es fácil sentirse identificado ya que no todo les sale bien.
En definitiva Nos queda lo mejor son una serie de relatos perfectos para aquellos inconformistas con la vida, que buscan algo diferente para llevar el día a día. Y sobre todo encontrar en este nuevo libro una vía de escape de todo lo que nos pasa. Como dice la autora, un mensaje de optimismo pero no para aquellos que cumplen sus sueños.