‘To The North’, un thriller donde un inmigrante rumano busca una nueva vida en un barco escondido de la tempetuosa tripulación
‘To The North’ es un viaje a bordo de un barco, es un viaje eterno y claustrofóbico. Mihai Mincan, el director, con amplia experiencia en documental asume ahora un reto gigantesco: un largometraje de ficción sumamente ambicioso. Una película rumana que se mueve en aguas internacionales protagonizada en su mayoría por taiwaneses y filipinos. Inspirado en hechos reales. Aquí vemos toda su ambición.
1996, mar abierto. Dumitru es un joven rumano de 24 años en busca, como otros tantos, de una nueva vida. No tiene ese gran sueño americano, se conforma con llamar a casa cuando llegue y conseguir un trabajo con el que ahorrar algo de dinero. Un barco en el sur de España parece la única forma de empezar. Con miedo, pero con esperanzas de algo mejor, se esconde entre contenedores en un buque. Sin embargo, ese barco no va a los Estados Unidos, sino a Canadá. La tripulación está compuesta por unos implacables taiwaneses y los inferiores filipinos. Joel, un filipino religioso, dará con Dumitru. Tratará de salvarlo, pero en un barco que acaba siendo más prisión que libertad, todo se torcerá.
Entre las cosas que más me han llamado la atención está esa barrera lingüística. Un rumano trata de comunicarse con un filipino. La solución acaba siendo lo que aquí conocemos como “Spanglish”. A ratos inglés, a ratos español, y a ratos su lengua materna que solo entienden ellos (y que nos dejan entender a nosotros los espectadores). La palabra “amigo” se convierte en universal en esas aguas internacionales.
La película es la más extensa de esta Sección del Festival, con 122 minutos que se precipitan a un final acelerado e impactante. También lo es la primera escena, que muestra una dura y actual situación. Las personas que luchan y se atreven a todo por ese sueño de una vida mejor, y que acaban solas en algún océano. Nadie es justo y nadie se salva en una película, que pese a suceder en 1996, deja ver lo poco que hemos cambiado. La religión que siguen y que piensan que les hace buenas personas acaba hilando un discurso complejo y preciso.
El barco es prácticamente el único escenario, un escenario asfixiante. No están seguro en ningún momento, condenados a ver lo complicado de vivir y tomar las decisiones más difíciles. Porque cuando estás en un alto cargo puedes elegir, y eso te pone a un lado u otro de ser ese hombre bueno. La línea que divide esto es tan frágil, tan difusa. Todo se rompe y nada está bien en ‘To The North’, que refleja una dolorosa y actual realidad. Ya en Filmin.