Bob Odenkirk (Better call Saul y Breaking Bad) se pone en forma y nos regala un genial thriller de acción
Quién iba a pensar que aquel 26 de Abril de 2009, el día en el que se emitió el episodio ocho de la 2º temporada de Breaking Bad, iba a nacer una leyenda como es Saul Goodman y pasó de ser un personaje recurrente a casi un tercer protagonista. La carrera de Bob Odenkirk dio un giro de 180º gracias a este personaje y se ganó por completo el corazón de todos sus fans con Better Call Saul, spinn-off de la serie original.
En esta ocasión se pone en la piel de Hutch, un hombre de familia, aparentemente, que se verá obligado a sacar su lado más oscuro y a repartir puñetazos a diestro y siniestro, como si de John Wick se tratara. Lo cierto es que tiene bastantes similitudes con esta saga, además de compartir productores y escritor (Derek Kolstad)
Ficha técnica y sinopsis
Título original: Nobody (2021) Estados Unidos
Duración: 92 min
Dirección: Ilya Naishuller
Guion: Derek Kolstad
Reparto: Bob Odenkirk, Aleksey Serebryakov, Connie Nielsen, Christopher Lloyd, Michael Ironside, Colin Salmon, RZA,
Productora: Perfect World Pictures, Odenkirk Provissiero Entertainment, 87North, Eighty Two Films. Distribuidora: Universal Pictures
Género: Acción. Thriller. Comedia negra
Sinopsis: Hutch Mansell (Bob Odenkirk) es un hombre de familia corriente. Una noche unos ladrones entran a su casa y él renuncia a defenderse y defender a su familia con el fin de evitar complicaciones. Esto decepciona a su hijo Blake (Gage Munroe) y a su mujer Becca (Connie Nielsen) que empiezan a distanciarse de él. El incidente le reconcome por dentro y hace que salga a la luz su lado más oscuro.
Implacable. Feroz. Ridículamente genial
Me encantan las películas de acción que mezclan elementos terrenales –y ridículos-, como es la pulsera de un gatito de su hija, con otros más complejos y violentos, como la mafia rusa y clubs nocturnos abarrotados de malotes. Véase la filmografía de David Leitch (Deadpool 2) pues es experto en sacar risas hasta en las situaciones más tensas y dramáticas y en la que, aquí, participa como productor.
Hutch es un padre de familia cansado, con un trabajo aburrido y una rutina pesada y cargante. De primeras podría parecer el típico sueño americano: una casa enorme, una mujer y unos hijos preciosos y un trabajo estable. En cuanto pasan los minutos nos damos cuenta que es de todo menos un sueño. Se le ve hastiado y desconectado totalmente de su familia y con una evidente crisis de mediana edad. Su hijo adolescente le odia, y su mujer más de lo mismo.
Los primeros veinte minutos son los encargados de presentar al desquiciado y despistado Hutch, de cómo lidia con una vida que, claramente detesta. Hasta que ocurre un ‘milagro’. Entran dos ladrones a robar a su casa y este no hace ademán de detenerlos, ya que se da cuenta que son una pareja de inexpertos ladrones más asustados que un cordero en navidad. Su familia, obviamente, se lo reprocha. Hasta que entra en juego el elemento catalizador, el desencadenante de todo esto: la pulsera de gatito que tenía su hija y que cree que los ladrones se la llevaron. Un elemento tan ridículo, y a la vez tan tierno, como es la pulsera de su hija, hace que avance la acción y pasemos de ver a un frágil y tranquilo padre a un auténtico lobo con piel de cordero.
Más realista. Menos fantasioso que John Wick
Lo que hace que ‘Nadie’ sea realmente buena y un soplo de aire fresco para el cine de acción, es su realismo y su capacidad de transmitir a través de la violencia, los sentimientos y la psique de nuestro protagonista.
Al contrario de lo que ocurría en John Wick, que a Keanu Reeves le ‘obligaban’ a salir de su jubilación anticipada (robaron su coche y mataron a su perrito, último regalo de su difunta esposa, yo también me volvería loco) aquí, a Hutch no le obliga nadie a sacar su lado más feroz. Ya se encarga él solito de meterse en problemas. Nos damos cuenta que es un ex-agente del FBI o de la CIA (yo ya me pierdo), y que lleva más de veinte años retirado. Es un hombre atormentado por su pasado y que, sin embargo, ansía volver a él. Es un ‘adicto’ a la violencia. Necesitaba estímulos en su penosa y aburrida vida (paralelismo con Breaking Bad), y no hay mejor estímulo que un despiadado magnate y mafioso ruso con sed de venganza.
Vemos a un Hutch vulnerable cuando tiene que enfrentarse a sus enemigos, y es que esos veinte años de retiro pesan mucho. Vemos sangre y violencia por doquier, y más de una vez nuestro protagonista acaba en el suelo. Lo contrario que ocurre en John Wick, el cual parece sumamente inmortal e impenetrable y que siempre se despacha a sus enemigos de la forma más variopinta posible.
No puedo acabar sin mencionar a nuestro queridísimo Christopher Lloyd (Regreso al futuro) que tiene un papel algo corto en la película, pero lleno de carisma y humor (ojalá ser como él de mayor).
Ideal para un sábado noche
‘Nadie’ es perfecta para verse un sábado noche con el volumen a tope para disfrutar los golpes y trompazos que se pega nuestro protagonista, además de apreciar la fantástica banda sonora. Se hace uso de míticas canciones del blues y del jazz, como What a Wonderful World de Louis Armstrong o Life is Bitch de Luther Allison. Una muy buena elección.
Gracias a sus escasos noventa minutos se hace amena, por lo que es imposible que aburra a alguien. Si te gusta el género de acción pasado de rosca, violento y lleno de anti-héroes, es tu película. Por favor, más de este tipo de películas y menos Fast and Furious. ¿Qué será lo próximo, Dominic Torreto aliándose con los Vengadores para salvar a la familia? Nah, no creo que Marvel esté interesado en aliarse con forzudos de gimnasio llenos de testosterona, está algo ocupada destrozando la infancia de muchos fans…(Spiderman, por si no lo habían pillado)
Valoración final: 8/10
