Del Revés 2, la ganadora del Óscar a mejor película de animación en 2015 vuelve después de casi 10 años con nuevas emociones.
Riley se enfrenta a nuevas emociones con la llegada de la pubertad. Alegría y compañía tendrán que luchar pata poder mantenerse en control pero Ansiedad no se lo pondrá nada fácil.
Hay que atreverse a realizar una secuela de una obra de arte con un Óscar a mejor película de animación como fue Del Revés, sabiendo que las segundas partes nunca fueron buenas.
Me levanto y aplaudo, pues no es el caso aquí. Han cogido algo que ya era perfecto y lo han mejorado, como añadirle purpurina a unicornio de colores.
Tenemos que tener en cuenta varias cosas con respecto a la primera. Partimos de la base de un éxito como fue la anterior, nuestra protagonista ha crecido y al crecer nuevas emociones emergen en el ser humano. Aquí la película deja de ser para niños y es donde Pixar tiene el huevo de oro.
Película de tono infantil, con muchos colores y personajes divertidos; pero parece estar hecha para un público adulto.
A las emociones de Alegría, Ira, Tristeza, Miedo y Asco se le unen Ansiedad, Envidia, Vergüenza y Ennui (aburrimiento) que se presentan como parte de la pubertad de Riley. Todo eso justo antes de un campamento. Y como ocurre en la vida real, esos personajes dejan de lado a los antiguos y se imponen en el control de la mente de la persona.
Se puede dividir la película en dos historias, las emociones y Riley.
En cuanto al argumento de las emociones, es parecido al anterior. Se alejan del mando de control y emprenden un viaje donde discuten y aprenden uno de los otros, también podemos ver mas de la mente de Riley, como el lugar donde se realizan los sueños.
Pero es el viaje de la protagonista el importante, el que marca una diferencia a la anterior película. Es un gusto ver como el crecimiento de Riley se ajusta a la realidad, y ahí es donde, junto a Ansiedad, la mayoría de la gente “adulta” se siente identificada.
Del Revés es de esas películas que todos deberían ver. Los más pequeños para entender cómo funcionan las emociones y que es válido sentirse triste o tener ansiedad. Para los adultos, poder identificarnos con Riley y reconciliarnos con esa pequeña parte que todos sufrimos a veces.
