Chica Sobresalto: “Cumplir años no significa que vayas a encontrarte”

Chica Sobresalto estrena su álbum Sinapsis

Javier Cendrero | Ana Sánchez

Maialen, más conocida por Chica Sobresalto, es compositora, cantante e instrumentalista. En 2017 publicó su primer álbum Sobresalto y en 2020 participó en OT. Después del concurso pasó a primera línea de actualidad y publica en 2021 Sinapsis, disco producido por Santos & Fluren.

Con temas como Adrenalina junto a Zahara, Sobresalto o Fusión del núcleo, la vallisoletana de 28 años se encuentra de gira acompañada de toda su banda compuesta por Aritz Legarrea (batería), Ander Arlegui (bajo y sintes), Ibai Sanz (guitarra y sintes), Gorka Cia (guitarra y sintes) y Olaia Inziarte (piano y coros).

Chica Sobresalto, Maialen
Maialen

PREGUNTA: Han pasado varios años desde tu primer concierto el cual catalogaste como horroroso y aseguraste que no volverías a vivir esa experiencia. Con el paso del tiempo, ¿ha cambiado tu forma de afrontarlo?

RESPUESTA: Hay un antes y un después que esta marcado por el humor. Al principio, mientras estaba tocando estaba relativamente bien, pero no podía vivir con el momento de entre canción y canción, hasta que en un bolo se me cayó algo y la gente se rió. Me di cuenta de que cuando la gente se ríe yo me relajo muchísimo. Ahí es cuando me dije: ”Creo que es por aquí”. No tiene mucho sentido porque las canciones son muy intensas y luego estoy contando chistes, pero vi que había mucha otra gente que lo hacía. Empecé a ser yo elevado al cuadrado a partir del humor que realmente es como me relaciono en mi día a día.

P: Chica sobresalto fue un personaje que creaste por la timidez. Una superheroína que se atrevía a hacer cosas que Maialen no hacía. ¿Qué le ha aportado Chica Sobresalto a Maialen?

R: Poco a poco he ido cogiendo esa valentía de Chica Sobresalto y cada vez tengo que recurrir menos a ella. Antes de los conciertos la invoco porque estoy yo, Maialen, con muchos pensamientos intrusivos y recurro a ella para decir muchísimas palabrotas antes de salir. Eso es lo que le sienta bien a mi banda.

Empecé a ser yo, elevado al cuadrado a partir del humor que realmente es como me relaciono en mi día a día.

P: Te encuentras en plena gira. Aparte de cantar tu último disco, Sinapsis, ¿cantas algo de tu anterior disco Sobresalto?

R: Sí, porque hay canciones que han crecido conmigo de forma positiva igual que hay otras que no han evolucionado de la misma forma. Por ejemplo en Sobresalto está O2, que habla del amor de una manera con la que ahora mismo no conecto. Sin embargo, Menosperdida es una canción que escribí muy joven, pero con la que todavía estoy muy conectada por la sensación de estar siempre esperando a madurar y a que la gente te tome enserio. Realmente vas viendo como en realidad cumplir años no significa que vayas a encontrarte en la vida. Aprendes muchas cosas pero no significa encontrar la panacea de nada.

P: ¿Qué inconvenientes tiene ser joven en la música?

Siempre va a haber alguien más mayor, más condescendiente o más narcisista que tú. Yo siempre decía: “Me quiero hacer mayor para que me tomen en serio”. Ahora ya soy mayor, digo otras cosas y siguen sin tomarme en serio. Siempre va a haber alguien más mayor o más gilipollas que tú [ríe].

P: En general no conocemos nada de la industria de la música, ¿qué diferencias existen entre la grabación del primer disco, hecho de manera independiente, con el de ahora, producido con Dromedario Récords?

R: Hay una parte muy bonita con Sobresalto de inocencia, de no tener ni idea, de creer que iba a triunfar y también otra de no disfrutarlo. Sin embargo, con Sinapsis hay un apoyo económico con el que se puede hacer mucho mejor y con Santos y Fluren, que para nosotras era un sueño. No obstante, me dio un poco de miedo empezar a pensar en qué quería la gente, en lugar de lo que quería yo. Al salir de OT de pronto tienes una repercusión que realmente ni siquiera es de verdad. Es muy complicado no acabar haciendo lo que quiere la gente.

Me dio un poco de miedo empezar a pensar en qué quería la gente en lugar de lo que quería yo

P: El título de tu gira es Bailando Raro, ¿cómo es Maialen bailando en una fiesta con amigos?

R: No soy muy de fiestas, pero sí que bailo mucho. Me encantan los típicos pasos y hacerlos en grupo: la moto bomba, el carro de la compra, las gafas… Adoro a Shakira desde siempre y hace unos años fui a clases de danza del vientre con una amiga. Pero mi relación con el baile es mala. Bailo muy mal y en OT hubo mucha risa y comedia con mi forma de bailar y con mi inglés. Bailar, aunque sea raro, es algo que debería hacer todo el mundo porque libera mucho y… ¿por qué no hacerlo aunque lo haga mal?

P: ¿Me podrías describir tu paso por OT con tres palabras?

R: Surrealista, divertido e intenso.

P: ¿Cómo se encuentra Maialen en cuanto a salud mental y cómo afrontas el mundo de las redes sociales?

R: Llevo yendo a terapia más de un año y mi mayor descubrimiento fue darme cuenta de que no sabía vivir. Mi vida siempre había estado marcada por algo, entonces de repente al ser autónoma y jefa de un proyecto, se me queda grande. A todo esto hay que sumarle el factor OT, pandemia…

Mi mayor descubrimiento fue darme cuenta de que no sabía vivir

Entonces yo exploto y, aunque Fusión del Núcleo comienza a petarlo, por dentro estaba rota. Sentía que a otros niveles todo me daba hostias y no había respiro. Entonces, gracias a la terapia he sido capaz de aprender a vivir, disfrutar y gestionar como afrontar los días. Estoy mejorando mucho y tengo siempre ganas de estar bien y feliz.

P: ¿Cómo gestionas la inmediatez que solicita el público hoy en día?

Muy mal. Creo que es la mayor enfermedad que hay ahora mismo. Muchos de los problemas mentales que estamos teniendo la mayoría de las personas es por eso. Vamos demasiado acelerados en todo. ¿Podemos dejar de correr? Yo el ritmo de la industria de la música no soy capaz de llevarlo, pero no voy a hipotecar mi salud por intentar seguirlo. Eso sí, me meto caña porque siempre he sido así.

P: Si Maialen fuese coleccionista ¿Qué coleccionaría?

R: Mmm… diría que libretas porque acumulo muchas.

P: ¿Tú plato de chef estrella?

R: Ahora mismo los noodles y unas croquetas de boniato y puerro.

P: ¿Una anécdota curiosa?

R: Una vez mi padre me castigó quitándome todas las muñecas de Pocahontas. Yo solía dormir con una y se había caído en el hueco de la cama. Fue la primera vez que tuve un dilema ético entre dársela o quedármela. Al final fui a dársela entre lágrimas y acabo devolviéndome todas.

P: ¿Qué le preguntarías a tú yo del futuro en nuestra próxima entrevista?

R: Me gustaría que me preguntaran cómo me ha sentado psicológicamente todo lo que voy soltar en mi próximo trabajo.

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Leer y personalizar
Privacidad